Sistemas y soluciones Revetón

Las problemáticas de las obras son muy variadas y muchas veces la solución no consiste en la aplicación de un producto sino en un proceso de distintas fases

EL DIAGNÓSTICO

Reconocimiento preliminar del estado del soporte, fase imprescindible para realizar los tratamientos adecuados a las patologías observadas.

LA IMPRIMACIÓN

Puente de adherencia necesario para fijar el acabado de forma eficiente.

LA PREPARACIÓN

Fase de reparación o saneamiento del soporte. Es la mejor garantía para un resultado duradero.

EL DIAGNÓSTICO

Revestimiento final que aportará al soporte las prestaciones y cualidades adecuadas a su naturaleza y su entorno.

Filtros
categoria sistema
Buscador de sistemas
Sistemas

Sistemas Anticorrosión

Las causas de la corrosión y la oxidación son variadas. La exposición a ambientes húmedos, la presencia de contaminantes industriales y la salinidad en zonas costeras son factores comunes. En entornos urbanos e industriales, la contaminación puede acelerar estos procesos.

Conocer cómo proteger el acero de la corrosión es imprescindible para mantener la durabilidad de las estructuras metálicas y previene de posibles problemas económicos y de seguridad en sectores como la construcción y la industria. Además, técnicas específicas para limpiar el óxido del acero son esenciales en industrias que requieren alta resistencia a la corrosión.

La corrosión y la oxidación son términos relacionados, pero no son lo mismo. La oxidación o corrosión electroquímica se refiere al deterioro del metal por la reacción química del entorno cuando un metal reacciona con el oxígeno.

Un ejemplo clásico es la formación de óxido de hierro, conocido comúnmente como herrumbre, que aparece cuando el hierro se expone al aire y a la humedad. Por otro lado, la corrosión química es la oxidación en aire a altas temperaturas.

El hierro y el acero sufrirán el fenómeno de la corrosión en presencia simultánea del oxígeno, agua, ácidos y bases (en exposición industrial). Si tenemos en cuenta que el acero es el metal más utilizado en estructuras y construcciones de todo tipo, éstas necesitarán siempre de algún tipo de protección cuando estén expuestas a la atmósfera.

La velocidad de oxidación depende de la temperatura, de la salinidad del fluido en contacto con el metal y de las propiedades del metal expuesto y se expresa a través de la pérdida de peso que sufre el material.

Para combatir estos problemas, existen diversos sistemas y procesos. Entre ellos se incluyen la aplicación de recubrimientos protectores, el uso de inhibidores de corrosión y tratamientos de limpieza que eliminan y previenen la formación de óxido.

Estos métodos son fundamentales para prolongar la vida útil de los metales en diferentes aplicaciones. Existen algunas normas de referencia que establecen los requisitos técnicos necesarios y que permiten validar visualmente la limpieza de la superficie. (UNE-EN ISO 12944-2).

En Revetón, ofrecemos una amplia gama de sistemas anticorrosivos diseñados para proteger y renovar superficies metálicas expuestas a diversos entornos.

Nuestros productos de conservación y protección están formulados para proporcionar resistencia a la corrosión en atmósferas con bajos niveles de contaminación (C2), media (C3) y alta (C4).